No afecta al humano, pero puede diseminarse fácilmente mediante nuestros zapatos, objetos contaminados, pelaje de los mismos perros, ya que el virus es muy resistente a las condiciones ambientales extremas de frío y calor.
¿Cómo sé si mi perro está enfermo? Este virus afecta principalmente a cachorros menores de 6 meses. Algunos de los síntomas que se pueden observar son: pérdida del apetito, decaimiento, vómitos y diarreas frecuentes y profusas, que a veces pueden ser sanguinolentas. Además, pueden presentar aumento de la temperatura rectal hasta 40°C, siendo lo normal entre 38,5 y 39,3°C.
Producto de los vómitos y diarreas, los cachorros se deshidratan fuertemente afectando a otros órganos como riñones y cerebro, produciendo un shock y muerte dentro de las 48 a 72 horas de iniciados los signos clínicos, sobretodo en cachorros menores de 3 meses. Incluso, pueden cursar con septicemia, debido a infecciones oportunistas durante el cuadro viral.
¿Cómo prevenir la enfermedad? Aunque tu cachorro viva en departamento, no está inmune. La principal vía de prevención es cumplir con el calendario de vacunaciones a partir de los 45 a 60 días de edad, reforzando el sistema inmune inmaduro del cachorro. Esto es muy importante, ya que si la revacunación se realiza muy espaciada entre una dosis y otra (más de 40 días) no se producirá el efecto del “refuerzo”. Después del año de edad, las vacunaciones deben ser anuales.
Otro punto importante es que, previo a la vacunación, el Médico Veterinario debe realizar un examen clínico exhaustivo para descartar la presencia de otras enfermedades, las cuales interferirían en la generación de una respuesta inmune efectiva.
Espero que estos datos te ayuden a mantener la salud de TU PERRO y porque…
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